Todos nosotros estamos conformados por un cuerpo físico, denso, tangible y un cuerpo energético, sutil que con practica y estudios podemos llegar a percibir y dimensionar. En ambos transcurren redes. En el cuerpo físico tenemos redes neuronales, canales respiratorios, circulatorios, etc. El cuerpo energético también está conformado por redes energéticas llamadas nadis que circulan a lo largo de nuestra columna y de ella surgen unos centros energéticos llamados chacras.
El término chacra procede del sánscrito y podemos traducirlo como círculo. Estos círculos energéticos con forma de cono se expanden desde los nadis. Los textos sagrados del hinduismo distingue 6 chacras si bien en la actualidad, distinguimos 7 chacras principales: corona, ajna, garganta, corazón, plexo, ombligo y base.
Ilustración donde se muestra la localización de los shad-chakra (‘seis chakras’) que se mencionan en las Upanishad (escrituras sagradas del hinduismo). En el siglo II d. C., el Yoga-kundalini- upanishad (uno de los más de cien antiguos textos hinduistas Upanishad) menciona brevemente el nombre de los seis chacras.
Al igual que nuestro cuerpo físico, nuestro cuerpo sutil precisa de limpieza y cuidado. Al limpiar y energizar los chacras conseguimos un equilibrio energético.
Los distintos chacras controlan y rigen los distintos órganos internos así como emociones.
En la meditación del próximo viernes día 29 de noviembre limpiaremos y energizaremos nuestros 7 principales chacras.
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